La solución obvia y principal para quitar el dolor de muelas es acudir a un dentista lo antes posible. Sin embargo, cuando no puedes acudir al dentista de inmediato, es posible que tengas que soportar algunas molestias mientras tanto. Los siguientes consejos pueden ayudarte a minimizar el dolor de muelas mientras esperas tu cita con el dentista.

Cuándo acudir al dentista

Aunque tu objetivo número uno puede estar centrado en eliminar el dolor de muelas lo antes posible, debes considerar primero la posible causa. Cuando nuestros cuerpos experimentan dolor, están enviando señales de advertencia a nuestros cerebros, diciéndoles que algo no está bien. Si tienes dolor oral, generalmente es una señal de que tienes un problema que necesita ser tratado lo antes posible.

El dolor bucal puede estar causado por una serie de problemas graves, como caries, un empaste dañado, una fractura dental, encías infectadas o un absceso dental. Si se ha producido este último, podría sufrir graves complicaciones si no recibe un tratamiento rápido. Estas complicaciones podrían incluir la pérdida del diente y del hueso de soporte. En algunos casos, las infecciones bacterianas también pueden extenderse a otras partes del cuerpo, lo que lleva a la hospitalización o algo peor. Por estas razones, es importante buscar un tratamiento de emergencia si muestra alguno de los siguientes signos de un diente con absceso:

  • Encías rojas e hinchadas
  • Fiebre
  • Un bulto rojo e hinchado en la boca
  • Sangre o pus
  • Dolor punzante
  • Sabor desagradable o salado en la boca
  • Cara o mandíbula hinchada

Si experimentas alguno de los síntomas anteriores, llama inmediatamente a tu dentista de confianza.

Cualquiera que sea la causa de tu dolor dental, es importante que visites a tu dentista local para una evaluación. Dicho esto, si sospechas que tu dolor dental está causado por una caries o una fractura, puedes utilizar las siguientes estrategias para minimizar el dolor hasta que puedas ver a un profesional.

10 formas de quitar el dolor de muelas al instante o almenos aliviarlo

Si tu dolor de muelas no está causado por un problema subyacente grave o estás esperando una próxima cita con el dentista, puedes reducir el dolor utilizando los siguientes remedios caseros para quitar el dolor de muelas

1. Aplica una compresa fría.

En general, hay dos formas de detener, mitigar o quitar dolor de muelas. La primera consiste en reducir la inflamación, mientras que la segunda se centra en interrumpir las señales de la lesión al cerebro. Puedes conseguir el primer objetivo aplicando una compresa fría o una bolsa de verduras congeladas en un lado de la cara durante 20 minutos seguidos. Sólo asegúrate de utilizar un trozo de tela como tope, para no dañar accidentalmente tu piel. Esto puede ayudar a aliviar las molestias y reducir la hinchazón.

2. Toma un antiinflamatorio.

También puedes reducir la hinchazón y atenuar las señales de dolor tomando un antiinflamatorio, como el ibuprofeno. Si tomas ibuprofeno, intenta seguir tomando el medicamento cada pocas horas, según la etiqueta del producto. Evita tomar el medicamento una vez y dejarlo cuando sientas alivio, o es probable que el dolor y la inflamación vuelvan a aparecer. Si no tienes ibuprofeno, puedes tomar acetaminofén en su lugar; sin embargo, aunque éste te ayudará con el dolor, no es un medicamento antiinflamatorio.

3. Enjuágate con agua salada.

Además de las compresas frías y los medicamentos de venta libre, hay algunas formas naturales de detener un dolor de muelas. Puedes limpiar las infecciones y promover el alivio temporal del dolor enjuagando la boca con agua salada caliente. Tratar de quitar un dolor de muelas con agua salada también puede ayudar a curar cualquier herida oral y reducir la inflamación. Sólo asegúrate de no tragar nada del agua salada mientras te enjuagas.

4. Utiliza una compresa caliente.

Puedes reducir las molestias aplicando una compresa caliente en el lado de la mandíbula. Si no tienes una compresa caliente, puedes hacer una llenando un calcetín limpio con arroz y atando un extremo. A continuación, coloca el calcetín lleno de arroz en el microondas y caliéntalo durante un par de minutos. El calor de la compresa ayudará a interrumpir las señales de dolor de la boca al cerebro.

5. Prueba la acupresión.

Algunas investigaciones sugieren que la acupresión puede reducir el dolor de muelas al hacer que el cuerpo libere endorfinas. Hay puntos clave específicos en el cuerpo que se cree que están asociados a las molestias bucales. Si desea probar la acupresión, considere la posibilidad de investigar recursos de Internet de buena reputación para obtener más información sobre estas áreas.

6. Utiliza bolsas de té de menta.

Generalmente consideradas seguras, las bolsitas de té de menta tienen propiedades adormecedoras suaves que pueden aliviar el dolor oral durante un corto tiempo. La mayoría de la gente prefiere enfriar las bolsas de té en el congelador durante un par de minutos antes de usarlas. También puedes aplicar la bolsita de té cuando aún está caliente y esperar a que se enfríe. Esto puede crear una sensación placentera que puede ayudar a alejar tu mente del dolor de muelas.

7. Prueba el ajo.

Durante miles de años, el ajo se ha utilizado por sus propiedades medicinales. Además de matar bacterias potencialmente dañinas, también puede actuar como analgésico. Para utilizar el ajo para el dolor de muelas, machaca un diente para crear una pasta pegajosa y aplícala en la zona afectada. Alternativamente, puedes masticar un diente de ajo fresco y escupirlo después.

8. Enjuágate con un enjuague bucal de guayaba.

Conocidas por sus propiedades antiinflamatorias, las hojas de guayaba también tienen rasgos antimicrobianos que pueden mitigar el dolor y esterilizar las heridas bucales. Puedes masticar hojas de guayaba frescas o hervir las hojas machacadas en agua para hacer un enjuague bucal.

9. Utilizar aceite de clavo.

Utilizado para tratar el dolor dental a lo largo de la historia de la humanidad, el aceite de clavo puede reducir la inflamación y adormecer el dolor oral. También contiene eugenol, un antiséptico natural que puede esterilizar las heridas bucales. Para tratar el dolor de muelas, aplica una pequeña cantidad de aceite en un algodón limpio y aplícalo en la zona afectada. Puedes diluir el aceite de clavo con unas gotas de agua o añadir aceite portador si te parece demasiado potente.

10. Prueba un enjuague bucal casero de tomillo.

El tomillo tiene potentes propiedades antioxidantes y antibacterianas. Para aliviar los síntomas del dolor de muelas, puedes añadir unas gotas de aceite esencial de tomillo al agua y hacer un enjuague bucal. También puedes diluir el aceite esencial de tomillo con unas gotas de agua limpia y añadirlo a una bola de algodón. A continuación, aplícalo en la zona afectada.

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Qué esperar en el dentista

Para tratar el dolor de muelas, el dentista revisará primero tu historial médico y te hará un examen. Te hará preguntas específicas sobre tu dolor de muelas, como cuándo empezó, dónde está localizado, su gravedad, qué te hace sentir peor y qué te hace sentir mejor. A continuación, el dentista le examinará las encías, los dientes y cualquier otra zona relevante. Puede ser necesario realizar radiografías u otras pruebas para determinar la causa exacta del problema.

Una vez que el dentista determine la causa, le indicará las opciones de tratamiento disponibles. En el caso de las caries, es posible que necesite un empaste. Si el nervio del diente está infectado, puede necesitar un tratamiento de conductos. Si la zona se ha infectado, el dentista puede recetar medicamentos antibióticos para eliminar las bacterias. En ocasiones, los dentistas utilizarán la fototerapia con láser frío, junto con otros tratamientos para reducir la inflamación y el dolor.

Dependiendo de la gravedad del problema, puedes recibir el tratamiento inmediatamente o unos días después del examen. En este último caso, tu dentista puede optar por recetarte analgésicos para ayudarle a sobrellevar las molestias mientras espera.

Cómo prevenir el dolor de muelas

La mejor manera de afrontar un dolor de muelas es evitarlo en primer lugar. Puedes reducir el riesgo de problemas de salud bucodental cepillándote bien los dientes dos veces al día y utilizando el hilo dental al menos una vez. También debes llevar una dieta sana, evitando los alimentos y bebidas azucarados o pegajosos. También debe tener cuidado de no masticar hielo o artículos duros que puedan causar una fractura en su diente. Por último, asegúrese de programar limpiezas y revisiones dentales periódicas, para poder tratar los problemas dentales menores antes de que se conviertan en problemas dolorosos que exijan tratamientos costosos.

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